5 CUADROS IMPORTANTES QUE VIVEN EN EL MUSEO DEL PRADO
El Museo del Prado (Madrid, España), abrió por primera vez al público el 19 de noviembre de 1819. Este recinto histórico y cultural importante para el mundo es hogar de más de cinco mil piezas de arte entre las que destacan autores como Goya, Velázquez y El Greco, entre otros.
EL CABALLERO DE LA MANO EN EL PECHO (1578 -1580)
Esta pintura es una de las más emblemáticas de Doménikos Theotokópoulos “El Greco” por haber sido una de las primeras que realizó en España y por haber estado expuesta desde época temprana en la pinacoteca.
El Greco pintó un grupo de retratos de caballeros del que forma parte esta obra. Un caballero con la mano en el pecho mira al espectador como si hiciese un pacto con él. La postura de la mano parece un gesto de juramento.
LA ANUNCIACIÓN (1425-1426)
Entre 1423 y 1429 el pintor italiano Guido di Pietro, mejor conocido como Fra o Fray Angélico, realizó sus primeras obras en el convento de Santo Domingo en Fiésole, Florencia, después de haberse convertido en dominico.
Asimismo, es considerada una de las primeras obras maestras del artista, en ella se aprecia como tema principal la Anunciación del arcángel Gabriel a la Virgen María, tema que se completa con las escenas del banco, otra tabla más estrecha situada debajo del tema principal.
Estas escenas son, por orden de lectura, el Nacimiento de María, sus desposorios con José, la Visitación a Santa Ana, la Epifanía de Jesús, la Purificación y el Tránsito del alma de María tras su muerte.
LAS MENINAS (1656)
La obra maestra de Diego Velázquez, pintada en 1656 en el Cuarto del Príncipe del Alcázar de Madrid, en la que representa a la familia del rey Felipe IV.
Es una de las pinturas imprescindibles y que más miradas atraen en el Museo del Prado. Este retrato de grupo con una cuidadísima composición, en el que se representan varias acciones a la vez y se juega con el acto de ver y de representar, es una de las grandes obras de la historia del arte occidental.
EL JARDÍN DE LAS DELICIAS (1503–1515)
Es el nombre contemporáneo con el que se conoce a una de las obras más conocidas del pintor neerlandés Jheronimus Bosch (el Bosco). Considerada una de las obras más fascinantes de la Historia del Arte, forma parte de la exposición permanente del Museo del Prado.
El tríptico dedica el panel izquierdo al Paraíso terrenal, el panel del centro retrata el mundo del pecado y en el derecho se representa el Infierno.
Es una obra de carácter moralizante, llena de fantasía y con una composición aparentemente caótica, plena de pequeños detalles, que la hacen interesante.
JUDIT EN EL BANQUETE DE HOLOFERNES (ANTES ARTEMISA) 1634
Obra maestra de Rembrandt, forma parte de un grupo de imágenes de diosas y heroínas que Rembrandt pintó entre 1633 y 1635.
Su iconografía ha sido muy discutida. Tradicionalmente ha sido identificada como Artemisa o como Sofonisba, con historias similares, confundidas con frecuencia en el siglo XVII y que gozaron de popularidad en la literatura y la pintura de la época.
Por su parte, en el catálogo razonado de Pintura holandesa en el Museo Nacional del Prado se ha propuesto una interpretación como Judit ante Holofernes ––un general asirio a las órdenes de Nabucodonosor II––.