Agricultores bloquean los Campos Elíseos para denunciar el ‘agribashing’
Por Radio Francia internacional
Centenares de agricultores, algunos en tractores, se dirigieron este miércoles hacia París para denunciar el “agribashing”, reclamar mejores precios para sus productos y presionar en las negociaciones anuales con el sector de la distribución.
Los convoyes salieron de madrugada de varios puntos cerca de la capital y avanzaron hacia París, donde provocaron algunos atascos aunque menores de lo esperado.
La protesta, convocada en toda Francia por los sindicatos FNSEA (Federación Nacional de los Sindicatos de Productores Agrícolas) y JA (Jóvenes Agricultores), reunió a unos mil tractores en la capital, que bloquearon el anillo periférico de la capital. Otros 200 agricultores bloquearon la avenida de los Campos Elíseos y lanzaron heno contra Le Fouquet’s, un conocido restaurante de lujo.
Sus objetivos son claros: expresar su hartazgo frente al “agribashing” (estigmatización y denigración de los agricultores), y solicitar una entrevista con el presidente Emmanuel Macron.
Contra el “agribashing”
“¡Tenemos la sensación de que la gente nos mira con sospecha! Incluso a veces con rabia, porque en realidad no entienden nuestro trabajo. Hoy en día cuando estoy en mi tractor hay gente que me tira piedras cuando paso cerca de las casas… ¡Se nota que no nos quieren! Nos tiran piedras, latas de cervezas, etc. También tenemos quejas en la Alcaldía y en las comisarías. Y eso todos los días”, denunció Christophe en la radio France Inter.
“Intentamos hacer muchas cosas a nivel técnico, para tener una agricultura duradera pero el problema es que a medida que avanza el tiempo nos van poniendo cada vez más trabas y es complicado resistir porque no toman en cuenta nuestros esfuerzos. Por eso uno de los mensajes a las autoridades es ¡Macron responde! Y esperamos que ese día de movilización sirva para que nos escuchen”, comentó asimismo Laura.
Los agricultores también protestan contra los tratados de libre comercio, piden mejores precios de venta de sus productos y quieren influir en las negociaciones en curso con los grupos de distribución franceses, propiedad de grandes cadenas de supermercados. Estas negociaciones anuales fijan los precios para un periodo de doce meses.
Con AFP