Ortega va camino a la reelección tras el arresto de 19 opositores
Por RFI
Cerca de una veintena opositores han sido detenidos en Nicaragua en medio de la ofensiva del presidente Ortega por despejar el camino para un cuarto mandato consecutivo. Los últimos detenidos son la ex primera dama María Fernanda Flores y el periodista Miguel Mendoza.
En Nicaragua sigue creciendo la lista de opositores detenidos a cinco meses de las elecciones. Este lunes fue detenida María Fernanda Flores, ex primera dama. Y la víspera, un quinto candidato presidencial, el periodista Miguel Mora. Los opositores políticos detenidos ya suman 19.
Ortega no ha formalizado sus intenciones para postular a un cuarto mandato consecutivo. Pero caben pocas dudas de que lo hará, teniendo en cuenta estas detenciones: 5 candidatos presidenciales, el último de ellos el domingo. También ex diplomáticos, politólogos, una ex primera dama.
La residencia de Carlos Fernando Chamorro, leyenda del periodismo en Nicaragua, fue allanada la víspera.
A todos ellos se les aplica una ley aprobada por el Congreso oficialista que permite procesar a quienes, a juicio del gobierno, cometan actos que “menoscaban la independencia, soberanía” e inciten “a la injerencia extranjera”.
Para Human Rights Watch, “los arrestos de alto perfil y otras graves violaciones de derechos humanos (en Nicaragua) contra críticos a pocos meses de las elecciones presidenciales programadas para el 7 de noviembre de 2021 parecen formar parte de una estrategia gubernamental para eliminar la competencia política, reprimir el disenso y facilitar la reelección del Presidente Ortega para un cuarto mandato consecutivo”.
Eso dice un informe titulado “Arremetida contra críticos: Persecución y detención de opositores, defensores de derechos humanos y periodistas de cara a las elecciones en Nicaragua”.
La ONG de defensa de los derechos humanos estima también que “la creciente campaña de violencia y represión contra miembros de la oposición y la sociedad civil que lleva a cabo el gobierno de Daniel Ortega requiere aumentar el rol que juega las Naciones Unidas respecto a la crisis en Nicaragua”.
Las acciones del gobierno de Ortega han motivado sanciones de la comunidad internacional por socavar la democracia y atentar contra los derechos humanos. México y Argentina, que hace unos días exhortaron a la “no intervención en los asuntos internos” de Nicaragua, llamaron a sus embajadores este lunes. Hace una semana, el consejo permanente de la OEA aprobó una resolución de condena a la persecución de opositores y demandó su liberación inmediata.
con AFP