Un botín inusual: 21 toneladas de pistachos robados en California
Por RFI
Un delincuente de 34 años fue detenido en California por robar 21 toneladas de pistachos. Fue identificado por las cámaras de vigilancia de la empresa que había robado. Los pistachos y otros frutos secos son especialmente buscados por los ladrones porque son caros y fáciles de almacenar.
Por la corresponsal de RFI en Washington, Anne Corpet.
Las 21 toneladas de pistachos robadas, valoradas en cientos de miles de dólares, se encontraron en un camión: el ladrón los había empaquetado en pequeñas cantidades para poder revenderlos más fácilmente.
Aparte del tamaño del botín, el caso no es inusual en California, donde se producen casi todos los pistachos estadounidenses. Una unidad especial de la policía encargada de perseguir a los ladrones de productos agrícolas ha notado una especial atracción por este tipo de productos.
Los frutos secos, el principal objetivo de los ladrones
El valor de los frutos secos comenzó a dispararse hace una década debido al aumento de la demanda mundial de estos productos dietéticos en países como China y las economías emergentes. Los robos de nueces se dispararon entre 2014 y 2017, por lo que el sector perdió más de siete millones de dólares en California durante ese tiempo.
El precio de los pistachos ha bajado desde entonces, pero sigue siendo lo suficientemente alto como para atraer la codicia de los delincuentes. Además, son un producto no perecedero, y la posibilidad de almacenarlos durante un largo periodo de tiempo antes de devolverlos al mercado garantiza un rendimiento de la inversión duradero.
Crimen organizado
Los ladrones han desarrollado estrategias bastante sofisticadas. “Se trata de criminales organizados, no de delincuentes de poca monta”, explica el sheriff del condado de Tulare. “Piratean las bases de datos de las empresas de transporte para robar información sobre sus conductores y los pedidos en curso, y los utilizan para recoger envíos con documentos de transporte que parecen auténticos”, detalla.
En otros casos, los ladrones sobornan a los camioneros para desviar su carga. Luego, los frutos secos se revenden en pequeñas cantidades a los minoristas, y a veces incluso se envían al extranjero en buques de carga. La unidad policial especializada en robos agrícolas ya ha viajado hasta México para recuperar pistachos robados.