¿Es correcto basar nuestra dieta principalmente en frutas?
En los últimos años, a raíz del veganismo la dieta basada en hortalizas, verduras y frutas se ha vuelto muy popular. De allí, ha surgido el frutarismo, una forma de alimentación a base de frutas. Dado las restricciones nutritivas que esta conlleva, nos preguntamos si es correcto basar nuestra dieta principalmente en frutas.
Comúnmente, el frutarismo se basa en una dieta donde el mayor porcentaje (entre el 55% y 75%) de los alimentos que se consumen son frutas. Si bien las frutas proporcionan un importante aporte vitamínico muy importante a nuestro organismo, ¿es saludable limitar nuestra alimentación a ellas?
Una dieta basada casi exclusivamente en frutas es deficiente en nutrientes
Limitar nuestra alimentación al consumo de frutas, excluye nutrientes de otros grupos alimenticios esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Por ende, una dieta basada casi exclusivamente en frutas será deficiente en hierro, calcio, proteínas, vitaminas, zinc y ácidos grasos que ofrecen otros alimentos y que son vitales para nuestra salud.
Incluso, la deficiencia de estos nutrientes puede acarrear problemas de salud como anemia, raquitismo, osteomalacia –ablandamiento y deformación de los huesos– e incluso afectar nuestro tono muscular.
Efecto contraproducente
Una dieta basada solo en frutas no solo evita que consumamos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita, también puede tener un efecto contraproducente. Esto debido a que las frutas se caracterizan por presentar altos niveles de fructuosa.
Esa no es más que azúcar simple, pero su consumo en exceso puede promover la acumulación de grasa en el hígado. En consecuencia, provoca resistencia a la insulina y la aparición de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD). Al respecto, en The Conversation opinan:
Si bien existe controversia sobre si la fructosa de la fruta es tan mala como el jarabe de fructosa, que se agrega a los alimentos para endulzarlos, los experimentos en ratas alimentadas con una dieta alta en fructosa mostraron similitudes con la enfermedad del hígado graso humano”.
Ortorexia nerviosa: lo sano en exceso es nocivo para nuestra salud
Los efectos negativos del frutarismo van mucho más allá. Esta dieta se asocia con un trastorno alimentario conocido como ortorexia nerviosa, una afección que demuestra que lo sano en exceso es nocivo para nuestra salud.
La ortorexia nerviosa implica restringir nuestros hábitos de comida a alimentos “puros” o “limpios”. No obstante, llega un punto en el que hábito se vuelve una obsesión, y se pone en peligro la vida de la persona afectada.
Para muestra, el caso de “una niña de nueve meses quien muere después de haber sido alimentada con una dieta a base de frutas. La niña murió muy por debajo de su peso y desnutrida. Además, se informó recientemente que un hombre de 49 años había desarrollado demencia reversible después de subsistir con una dieta a base de frutas”, señalan en The Conversation.
Evidentemente, limitar el consumo de alimentos no solo acarrea problemas alimenticios, sino también trastornos psicológicos como depresión y ansiedad. Por ello es que la ortorexia nerviosa se le conoce como una “enfermedad disfrazada de virtud”.
En conclusión, basar nuestra dieta en frutas no es recomendable para nuestra salud en general, pues estos alimentos por sí solos no aportan el valor nutritivo que nuestro organismo necesita para funcionar correctamente.