Ni presencial, ni en línea: maestros de educación básica en Michoacán no regresan a clases por falta de pagos

“Ahora mismo no hay certeza de cuándo pagarán esos adeudos y tampoco hay certeza para que se paguen las nueve quincenas que faltan para cerrar este 2021. Por eso lo decimos tajante: no vamos a volver a dar clases, ni siquiera de manera virtual, hasta que se pague lo que se debe a los maestros”, advirtió Guzmán. 

Por su parte, Héctor Ayala, secretario de educación de Michoacán, concedió que existen los adeudos, aunque aseguró que la cantidad es mucho menor: 651 millones por 5 bonos del año pasado; más el retroactivo salarial por 142 millones de pesos; más la quincena de este primero de septiembre, que, al ser doble, explicó el funcionario estatal, asciende a otros 560 millones de pesos. 

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En total, según las cuentas de la secretaría de educación michoacana, se debe a los maestros estatales 1 mil 353 millones de pesos.

“Hoy (lunes 30 de agosto) ya estamos liberando una de las quincenas adeudadas, ya la secretaría de Finanzas nos está ayudando con eso. Pero seguimos teniendo adeudos”, admitió el secretario, que pidió a los docentes inconformes “solidaridad y empatía” para que sigan trabajando en beneficio de los menores, “a pesar de la situación tan compleja”. 

“Les pedimos que nos ayuden a formar a los niños y niñas, porque esta dificultad financiera no se va a solventar de aquí al primero de octubre”, agregó Ayala, en referencia a que será en el próximo mes de octubre cuando el ejecutivo actual de Silvano Aureoles deje el gobierno en manos del nuevo mandatario, Alfredo Ramírez Bedolla, del partido Morena. 

No hay dinero para el último tercio del año

Cuestionado acerca de cómo se llegó a esta situación de deuda con los docentes michoacanos, Héctor Ayala señaló que existe “un déficit en las finanzas educativas estatales” que viene de años atrás y que se explica, básicamente, por un aumento en la creación de plazas de maestros que ha estado por arriba de los ingresos del estado. 

“En 1992, por ejemplo, teníamos 9 mil trabajadores estatales. En 2015, cuando llegamos al gobierno de Michoacán, había 32 mil maestros. Es decir, la nómina creció más de un 200%. El estado no tenía la posibilidad de ir pagando y se fue generando una falta de solvencia”, detalló Ayala. 

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Por ello, el gobierno michoacano inició en 2019 conversaciones con el Gobierno Federal de López Obrador para que la Federación asumiera íntegra la nómina de maestros estatales, que asciende a 9 mil millones de pesos. 

Sin embargo, el convenio que finalmente se acordó es que el Gobierno Federal asumiría solo el 34.6%; es decir, un tercio de las nóminas. Y que el ejecutivo estatal pondría los 6 mil millones restantes. 

El problema, expuso el secretario de educación, es que para este 2021 la secretaría estatal se quedó con un presupuesto para pagar nóminas de tres mil millones de pesos, “por lo que falta otro tercio prácticamente” para completar los tres mil millones restantes que sumarían los 9 mil millones de nómina magisterial. 

“Para el último tercio de este año no hay dinero en las finanzas estatales para cubrir las nóminas, por eso estamos preocupados y trabajando con la secretaría de educación federal, y pidiendo apoyo y respaldo a la secretaría de Hacienda”. 

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En una entrevista previa con Javier Risco y Gabriela Warkentin, en W Radio, Héctor Ayala aseguró que esperan tener esta misma semana una respuesta de la Federación, “para ver si hay alguna fuente de financiamiento o para ver si hay posibilidad de tener algún adelanto, porque queremos dejar las cosas bien en el sector educativo de Michoacán”. 

Piden intervención de Gobierno de AMLO

Ante esta situación, Gamaliel Guzmán, el secretario general de la CNTE Michoacán, también pidió la intervención del Gobierno Federal. 

“No es cosa menor que 28 mil trabajadores estatales se encuentren sin salario y sin certeza salarial para las próximas quincenas, y no vemos una solución a este problema de manera inmediata”, apuntó Guzmán. 

“Tiene que haber mucha voluntad política, y por eso estamos haciendo un llamado al Gobierno Federal, porque, si bien es cierto que ellos cumplieron al pagar lo que les corresponde, el 34.6%, también es cierto que se comprometieron a que habría una solución de fondo, cosa que no ha sucedido”. 

No obstante, la relación entre la CNTE y el presidente López Obrador no parece estar en su mejor momento. Apenas el pasado 27 de agosto, integrantes de la Sección 7 de la CNTE impidieron que el mandatario llegara a la conferencia de prensa que da en las mañanas, programada ese día en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 

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En un enlace desde el interior de su vehículo, López Obrador denunció que un grupo de maestros le impidió la entrada bajo la condición de que tenía que atenderlos inmediatamente y resolver sus demandas. 

“Esto no lo puedo permitir, no puede el presidente de México ser rehén de nadie”, sostuvo el mandatario, que destacó que en reiteradas ocasiones ha hablado con los miembros de la CNTE, pero que en el caso de Chiapas y Michoacán “hay intereses creados por la dirigencia”. 

Dos días después, el pasado domingo 29, López Obrador mandó un mensaje a los maestros inconformes que lo interpelaron durante su reciente gira por Chiapas: “Ni (el grupo opositor) Frena ni la CNTE detienen al presidente”.