El aguacate afecta la distribución de la grasa abdominal en las mujeres
El tipo de alimentación que llevemos puede marcar una gran diferencia a la hora de determinar nuestra salud. De hecho, la comida que ingerimos podría incluso llegar a influenciar la forma en la que nuestro cuerpo procesa los nutrientes que recibe. Como un ejemplo de eso, tenemos el caso de las mujeres con sobrepeso, cuya distribución de la grasa abdominal varió dependiendo de si comían o aguacates o no.
El estudio que siguió de cerca esa posibilidad se publicó recientemente en The Journal of Nutrition. Para su elaboración, la investigación estuvo dirigida por Naiman Khan, profesor de kinesiología y salud comunitaria de Illinois.
El aguacate podría ayudar a distribuir mejor la grasa abdominal en las mujeres
Para el caso actual, los investigadores se dieron a la tarea de hacer seguimiento a 5 mujeres y hombres con sobrepeso. Cado se ofreció voluntariamente a cambiar sus hábitos alimenticios por completo durante 12 semanas.
En ese tiempo, los científicos desarrollarían una dieta para las mujeres cuya única diferencia sería el consumo de aguacates. Al final del proceso, se harían mediciones de la ubicación de la grasa abdominal en sus cuerpos. De esa forma, se determinaría claramente si cambió o no dependiendo del tipo de alimentación.
Al final, los investigadores de la Universidad de Illinois lograron detectar un cambio muy particular en las mujeres del estudio. Mientras que los hombres no experimentaron ningún cambio, las mujeres que comieron aguacates tuvieron una notoria modificación de la ubicación de su grasa abdominal.
El objetivo no era la pérdida de peso; estábamos interesados en comprender qué efecto tiene el consumo de aguacate en la forma en que las personas almacenan la grasa corporal. La ubicación de la grasa en el cuerpo juega un papel importante en la salud”, dijo Khan.
Sobre la grasa abdominal
Tomando lo anterior en cuenta, vale la pena resaltar además que en el abdomen existen dos tipos de grasa: 1) la subcutánea (acumulada justo bajo la piel) y 2) la “profunda” o visceral (que rodea los órganos internos). De acuerdo a los registros obtenidos, las mujeres que consumieron aguacate tuvieron una menor acumulación de grasas viscerales.
En otras palabras, su organismo, a pesar de tener un exceso de grasa, la estaba almacenando en los lugares menos dañinos del cuerpo. Unos que, además, ceden con más facilidad a la hora de ejercitar para quemar la grasa acumulada.
Por otra parte, quienes tienen mayor grasa visceral están en riesgo de sufrir complicaciones de salud como la diabetes. De allí que se haga tan importante observar cómo pequeños cambios en la dieta podrían mejorar la salud general de las personas.
Es importante demostrar que las intervenciones dietéticas pueden modular la distribución de la grasa. Saber que los beneficios solo eran evidentes en las mujeres nos dice un poco sobre el potencial de que el sexo desempeñe un papel en las respuestas de las intervenciones dietéticas”, comentó Khan.
La investigación debe continuar
Ahora que lo anterior ha sido comprobado, Khan y sus colegas esperan llevar sus investigaciones a niveles más profundos. Por ejemplo, esperan crear nuevos estudios que también revelen la salud intestinal y física de sus participantes. De esa forma, esperan crear poco a poco un mapa completo de los efectos metabólicos que puede tener en nuestro organismo algo tan sencillo como la adición del aguacate a la dieta.
Nuestra investigación no solo arroja una luz valiosa sobre los beneficios del consumo diario de aguacate en los diferentes tipos de distribución de grasa entre los géneros, sino que nos proporciona una base para realizar más trabajos para comprender el impacto total que tienen los aguacates en la grasa corporal y la salud”, concluyó Richard Mackenzie, coautor del estudio y profesor de metabolismo humano en la Universidad de Roehampton en Londres.