Descubren defensas genéticas que permiten a las tortugas gigantes vivir libres de cáncer
El aumento del tamaño del cuerpo y la longevidad de los animales tiene muchos costes, como la acumulación de daños genotóxicos y citotóxicos que conlleva tener más células y vivir más tiempo. Sin embargo, algunas especies han superado estas barreras y han evolucionado con tamaños corporales notablemente grandes y vidas largas. Uno de los casos más relevantes lo observamos en cómo las tortugas gigantes de las Islas Galápagos viven hasta 100 años libres de cáncer.
¿Qué nos pueden decir las tortugas gigantes sobre el cáncer?
En este sentido, los resultados de un nuevo estudio revelaron que, en comparación con otras tortugas, las tortugas gigantes de las Islas Galápagos evolucionaron para tener copias adicionales de genes, llamadas duplicaciones, que pueden proteger contra los estragos del envejecimiento, incluido el cáncer.
Los experimentos realizados demostraron que las células de estas criaturas son extremadamente sensibles a ciertos tipos de estrés relacionados con las proteínas dañadas. Por lo tanto, cuando se exponen a estas presiones, las células se autodestruyen mucho más fácilmente que otras células de tortuga a través de un proceso llamado apoptosis.
Sobre la base de estas observaciones, los investigadores concluyeron que la destrucción de las células defectuosas antes de que tengan la oportunidad de formar tumores puede ser el factor determinante que les permite a las tortugas gigantes tener largas vidas y poder evadir el cáncer.
Hallazgos relevantes
Estos hallazgos son relevantes porque, en igualdad de condiciones, los animales grandes que viven durante mucho tiempo deberían tener tasas de cáncer más altas. Esto se debe a que las criaturas grandes y longevas tienen muchas más células, y cuantas más células tiene un cuerpo, mayor es la probabilidad de que surjan mutaciones cancerosas.
Uno de los principales enfoques de esta investigación es comprender los mecanismos biológicos que ayudan a los animales grandes como las tortugas de Galápagos a vivir por más tiempo y prosperar. Si bien fue simple curiosidad lo que impulso a los autores a realizar este estudio los hallazgos podrían tener implicaciones prácticas.
A este respecto, el investigador Vincent Lynch, catedrático en el departamento de Ciencias Biológicas de la Universidad de Buffalo y autor principal del estudio, comentó:
“Si podemos identificar la forma en que la naturaleza ha logrado que ciertas especies desarrollen este tipo de protecciones genéticas, tal vez podamos encontrar una manera de traducir esos descubrimientos en algo que beneficie la salud y la enfermedad humanas”.
Los autores del estudio señalan que los resultados de esta investigación ofrecen una ventana para examinar una lista de genes y descubrir su conexión con el cáncer y la longevidad. La esperanza es que en el futuro cercano los investigadores puedan replicar estos genes en el laboratorio.