QUÉ ES EL LAGRIMAL Y PARA QUÉ SIRVE

No: el lagrimal no sólo sirve para lubricar los ojos, ni para liberar lágrimas cuando estamos tristes. Aquí te explicamos por qué.

Si jalas suavemente el párpado inferior de cualquiera de tus ojos, te encontrarás con un agujero minúsculo. Existe la creencia popular de que de ahí salen las lágrimas cuando estamos tristes, o lloramos de risa. Sin embargo, la función biológica de este hoyo en los ojos —conocido médicamente como ‘lagrimal’— va mucho más allá de la lubricación de los globos oculares. Aquí te explicamos por qué.

¿Para qué sirve el lagrimal de los ojos?

lagrimal
Fotografía: Wikimedia Commons

El hoyito que todos los seres humanos tenemos en ambos ojos (como se muestra en la imagen) se llama lagrimal. Sirve para conectar los conductos lagrimales de los ojos con la nariz. En otras palabras, ayudan a drenar las lágrimas desde la superficie del globo ocular hasta con el conducto nasolagrimal. Esto permite que los fluidos lleguen hasta la cavidad nasal.

Naturalmente, las lágrimas se forman y guardan al interior del párpado. Ahí, se absorben por el punto lagrimal y se conducen hasta un canal común del saco lagrimal. Anatómicamente, se puede describir como sigue:

“La glándula lacrimal yace dentro de la órbita sobre la porción exterior de la parte superior del ojo. Esta glándula secreta continuamente lágrimas que humedecen, lubrican y protegen la superficie del ojo”, explica Medline Plus.

Por lo tanto, el exceso de estos fluidos se drenan por el lagrimal, que terminan por vaciarse hasta la cavidad nasal. Visto de otra manera, la función de este agujero es evitar que los ojos queden demasiado húmedos, o que lagrimeen todo el tiempo. Por esta razón, cuando lloramos —de tristeza o de risa—, el exceso de estos fluidos corre por el rostro.

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¿Es normal tener un agujero en los párpados?

Todos los seres humanos tenemos un lagrimal por cada ojo. Lo necesitamos para limpiar los globos oculares, así como para liberar el exceso de fluidos que generamos de manera natural en estos conductos del cuerpo.

Por esta razón, contar con este agujero en el párpado es normal, siempre y cuando se mantenga con las proporciones adecuadas. El lagrimal tiene que ser pequeño y delgado, casi imperceptible. Si aparecen otros hoyos en los párpados, se genera resequedad o algún otro malestar sobre la piel o directamente en los ojos, lo mejor sería visitar a un especialista.

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