¿Qué tan difícil es ver una estrella fugaz en el cielo?
Si eres un observador recurrente del cielo nocturno es probable que en algún momento hayas visto una estrella brillante volar a gran velocidad y desaparecer. A estos astros se les conoce como estrellas fugaces y, desde la antigüedad, son consideradas símbolos de “buena suerte”, debido a que es muy difícil avistar una en el cielo. Pero ¿realmente son las estrellas fugaces tan escurridizas? Veamos que dicen los expertos.
¿Qué son las estrellas fugaces?
Aunque comúnmente se les conoce como “estrellas”, estos cuerpos celestes tan singulares en realidad son meteoritos. Concretamente, meteoritos de polvo espacial que se queman al entrar en contacto con la atmósfera de la Tierra, produciendo un trazo de luz similar a una estrella.
“Esta luz es el rastro visible de gases en la atmósfera superior de la Tierra, que son calentados hasta la incandescencia por el paso a alta velocidad de un meteoroide, o partícula meteórica, que intercepta la Tierra”.
Edwin Charles Krupp, astrónomo y director del Observatorio Griffith en Los Ángeles
Por tanto estás “estrellas” no están fijas en un punto, como las que vemos cada noche, sino que dependen de las ondas magnéticas y los vientos espaciales para llegar a nuestra atmósfera. De allí que muchos las consideren “escurridizas”, cuando en realidad son bastante frecuentes en el cielo.
Las estrellas fugaces son más frecuentes de lo que parece
De acuerdo con los astrónomos, cada día chocan alrededor de 25 mil meteoritos fugaces contra la atmósfera. La mayoría procedentes del cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter.
El problema es que estas estrellas fugaces son bastante quisquillosas, y no se dejan ver así como así. Para hacerlo, deben cumplirse dos condiciones.
Las estrellas deben impactar de noche
Al igual que ocurre con las estrellas comunes, los astros fugaces solo pueden verse de noche. Esto debido a que la luz del Sol es lo suficientemente brillante como para eclipsar cualquier cosa que brille menos, como las estrellas, lo que reduce casi en la mitad las probabilidades de avistamientos.
Sin embargo, las estrellas no pueden huir de la medianoche, cuando no existe ninguna luz tenue que las esconda.
Solo se pueden ver las estrellas fugaces masivas
La mayoría de los meteoritos que chocan con la atmósfera son muy pequeños, similares a un grano de arena según los astrónomos. Algo muy fácil de percibir para los astrónomos con telescopios de alta tecnología, pero muy difícil para nosotros que solo contamos con lo que vemos desde nuestra ventana.
Entonces… ¿Cuántas estrellas fugaces se pueden ver en una noche?
Si esta pregunta la hubiera hecho alguien hace cien años la respuesta sería cerca de 10 cada hora, siempre que sean grandes y esté oscuro. Pero, en la actualidad, con suerte podremos ver una o dos estrellas fugaces a simple vista. Esto debido a que hemos perdido la capacidad de ver el cielo nocturno.
Se estima que el 80% de la población mundial vive bajo “skyglow”, es decir, con una contaminación lumínica tan intensa que parece que nunca es de noche. Una realidad a la que nos hemos acostumbrado y que ha convertido a las estrellas fugaces en algo “escaso en el cielo”, cuando no deberían serlo.
“La contaminación lumínica nos niega innecesariamente las estrellas. Pero muchos de nosotros somos culpables de estar “ocupados por otras cosas” y no prestarle atención al cielo”.
Edwin Charles Krupp
Afortunadamente, aún existen 195 zonas alrededor del mundo que han sido decretadas como “Dark Sky Places”, es decir lugares en los cuales pueden verse sin problemas estrellas fugaces. Aunque seguramente ninguno de estos está cerca de nuestro hogar, ya que la mayoría corresponden a reservas naturales. Por ejemplo, la del Parque Nacional de Northumberland en Inglaterra, o el Desierto de Atacama en Chile.
La única forma en la que podemos ver actualmente estrellas fugaces desde nuestra ventana, según los astónomos, es durante las lluvias de meteoritos que ocurren cada agosto, cuando la Tierra pasa por el cinturón de asteroides de las Perseidas.
Así que, las estrellas fugaces no son escasas, solo difíciles de ver en un mundo tan contaminado y horrible como el que vivimos.