Así es como el arte puede ayudar a los pacientes con cáncer a superar su ansiedad
El arte tiene la fuerza para cambiar y mejorar nuestras vidas. Da igual que seamos niños o adultos, ricos o pobres, mirar obras de arte y discutirlas en grupo puede ayudarnos a calmar nuestra mente aún en los peores momentos. Emily Gore, estudiante de Medicina de la Universidad de Rochester, confirmó este poder curativo del arte en los pacientes con cáncer del Instituto Wilmot Cancer.
El arte es siempre el mejor aliado de la medicina
Emily notó que muchos pacientes con leucemia hospitalizados en su planta estaban sufriendo cuadros clínicos de ansiedad y depresión durante la pandemia. Esto debido a que no podían recibir visitas de familiares ajenos al centro oncológico, para evitar el riesgo de contagio por Covid-19.
Como científica e hija de artistas, la joven vio en esta situación una oportunidad para demostrar el poder del arte en la medicina. Con lo cual organizó un ensayo clínico improvisado que, básicamente, consistía en colocar obras de arte al lado de la cama de sus pacientes con cáncer.
Aunque siendo precisos serían “imágenes digitales” de esas obras de arte, ya que no podía disponer de los cuadros originales de Cezanne, Da Vinci o Van Gogh para la causa.
Al cabo de unos días, Emily Gore notó como la mayor parte de sus pacientes comenzaron a reírse de nuevo y expresar comentarios jocosos como: “paso la mitad de mi tiempo mirando al cachorro porque me hace sonreír” o “cada día encuentro algo nuevo en la imagen, realmente iluminó mi día”. Lo que ella tradujo porcentualmente en una reducción del 46% de la ansiedad entre los pacientes con leucemia.
¿Por qué el arte cura la ansiedad en los hospitales?
El arte tiene muchas caras que pueden ser beneficiosas para la salud de los pacientes con ansiedad que, además, sufren de cáncer. Principalmente porque es una actividad que distrae la mente de los problemas, lo que puede ser beneficioso durante una hospitalización.
Después de todo, el mundo de las personas hospitalizadas se reduce a sesiones de terapia y muchas horas en cama, por lo que es muy fácil que estos se sientan solos o deprimidos en cuestión de días. De allí que necesiten estímulos visuales que los alegren, o al menos les recuerdo cómo es el mundo exterior.
“Ser una persona social en un hospital es la parte más difícil. Las imágenes me ayudan a conectarme con otros. Hacen la diferencia”.
Melissa Ogletree, paciente con leucemia en el Wilmot Cancer
El potencial terapéutico del arte
Hace poco, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un estudio en el que analizaron 900 publicaciones científicas también relacionadas al arte y sus beneficios terapéuticos. Allí descubrieron que las bondades del arte no se quedan solo en el mero placer estético, sino que son útiles para tratar a pacientes con enfermedades terminales como el cáncer o la diabetes.
El principal motivo es que estas naturalmente resultan “atractivas” para nuestro cerebro, lo que hace que segregue serotonina, oxitocina y dopamina. Tres hormonas responsables del amor y del bienestar que, en conjunto, no solo alivian la mente sino que reducen los niveles de cortisol en el cuerpo. Lo que físicamente se traduce en una mayor sensación de ligereza corporal y en un ritmo cardíaco estable.
Eso sí, siempre y cuando las obras de arte no muestren episodios trágicos que le hagan recordar a los pacientes con cáncer su condición ansiosa. Como por ejemplo “El Grito” de Edvard Munch, “Cristo” de Odilon Redon o “El peregrinaje de San Isidro” de Francisco de Goya.
“La mayoría de los pacientes prefirió imágenes de trazo suave con azules y verdes porque cualquier cosa con rojo recordaba a las extracciones de sangre”.
Emily Gore
¿Qué significa esto para los pacientes con cáncer en el mundo?
El proyecto de arte y ciencia de Emily Gore ha sido un éxito en la planta de oncología del Instituto Wilmot Cancer, y ya está empezando a utilizarse en otros centros médicos de Nueva York. Con lo cual es posible que las obras de arte pronto puedan volverse costumbre en los hospitales y entre los pacientes con cáncer.
No sabemos hasta qué punto esto sea así en el futuro. Pero esperamos que cada día más personas puedan disfrutar del arte.