El Águila Real, tesoro zacatecano
Zacatecas tiene 34 parejas de las 174 de águila real que hay en el país, y es el segundo estado con más población de esta ave en México.
El municipio reconocido como el hogar predilecto del águila real es el municipio de Monte Escobedo, donde habitan alrededor de 18 parejas de águilas, este municipio tiene con un clima frío y que posee un sistema montañoso muy escabroso derivado además de valles, cañadas, mesetas, y desfiladeros, un terreno con las condiciones perfectas para la anidación de éste ejemplar.
Este municipio tiene una amplia gama de especies endémicas que habitan en el lugar como venado, pavo silvestre, gato montés, leoncillo, coyote, zorra, liebre, ardilla, víbora de cascabel, alicante chirrionera, entre otros.
Los registros de ejemplares de Águila Real se tienen en 31 áreas naturales protegidas, en valles, laderas, cañadas y praderas de Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Sinaloa, Nayarit, Durango, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Querétaro, Guanajuato y Oaxaca.
El Águila Real continúa en la categoría de “Amenazada”, de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana 059, debido a que su población se encuentra en peligro de desaparecer en el corto o mediano plazo por la modificación y pérdida de su hábitat, cacería furtiva, tráfico ilegal y la muerte de ejemplares que se electrocutan en torres eléctricas.
Esta especie es importante en los ecosistemas, ya que forma parte de un eslabón cumbre en las cadenas alimenticias, por lo que su presencia indica buenas condiciones del mismo.
Llega a medir 2.20 metros de punta a punta de sus alas y 93 cm, de pico a cola, siendo la segunda ave más grande del mundo. Tiene la mejor vista del reino animal, puede ver un conejo a 2 kilómetros de distancia y alcanza velocidades en picada de 220 kilómetros por hora.
El Águila Real continúa en la categoría de “Amenazada”, de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana 059, las principales amenazas para la especie son la caza furtiva, la electrocución a causa de las instalaciones eléctricas, por pérdida de hábitat con perturbación de sus nidos y el tráfico para tenerlas en cautiverio.
Existe un programa de telemetría que se enfoca en dar seguimiento a las crías y monitorear si logran entrar en su edad reproductiva para dar seguimiento al nacimiento de nuevos polluelos. Es importante que la federación y los estados con población de parejas de águilas, como Zacatecas, sigan implementando programas de conservación y concientización en las personas, ya que son la mayor amenaza para el águila real.