Un asteroide pasó cerca de la Tierra sin advertir a los astrónomos
La agencias espaciales de diferentes partes del mundo se encargan de monitorear lo que ocurre en el espacio exterior y las cercanías de la Tierra. Sin embargo, ni siquiera la NASA de pudo detectar a tiempo un pequeño asteroide que se acercó demasiado a nuestro planeta la semana.
El asteroide pasó desapercibido a los ojos de los telescopios y los astrónomos, que no supieron que el objeto existía sino hasta horas después de su desaparición del lado diurno de la Tierra.
Objetos cercanos a la Tierra
Los cometas y los asteroides que orbitan dentro de nuestro sistema se conocen formalmente como objetos cercanos a la Tierra o NEO, según el Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) de la NASA. Se les considera así cuando se acercan dentro de 1,3 unidades astronómicas, lo que equivale a 194,5 millones de kilómetros.
La agencia espacial estadounidense usa telescopios dentro de la Tierra y en el espacio para detectarlos y monitear su actividad, rastrear sus órbitas y, en definitiva, conocer su idiosincrasia. Esto es, por ejemplo, determinar su tamaño, forma y composición.
Todo esto es de gran utilidad para la humanidad ya que nos permitiría identificar objetos potencialmente peligrosos y buscar formas de protección o de abordaje. La Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria de la NASA se encarga de ello.
Pero la cercanía no es necesariamente el primer factor que hace a un asteroide peligroso para la vida en la Tierra, sino el tamaño. Según la agencia, para que un NEO se considere peligroso debe medir al menos 140 metros de diámetro.
Hasta el momento, la NASA ha identificado unos 27,000 NEO, de los cuales apenas 9,800 tienen al menos este diámetro; entre ellos, 890 tienen 1 kilómetro de diámetro, lo que los hace particularmente grandes y, por tanto, peligrosos para nosotros.
Un asteroide del tamaño de un refrigerador
Pero este no es el caso de Asteroide 2021 UA1, como se ha apodado al que pasó desapercibido frente a los astrónomos. Su diámetro es de apenas 2 metros y, por lo tanto, demasiado pequeño para representar una amenaza para los habitantes de nuestro planeta. Si bien este no fue su destino, de haberlo sido, la mayor parte de su cuerpo rocoso se hubiese desintegrado en la atmósfera antes de llegar al suelo.
Su trayectoria el 24 de octubre incluyó una ubicación sobre la Antártida terrestre dentro de 3,000 kilómetros de la Tierra, por lo que estuvo más cerca de nosotros de lo que lo están los satélites, por ejemplo. Esto convirtió al Asteroide 2021 UA1 no solo en uno muy sigiloso por haber pasado desapercibido, sino en el tercero más cercano en acercarse al planeta sin llegar a golpearlo.
El Asteroide 2021 UA1 pasó desapercibido
El asteroide pasó por el lado diurno de la Tierra desde la dirección del sol, por lo que pasó desapercibido hasta aproximadamente 4 horas después de pasar por su punto más cercano.
Ahora bien, este no fue el caso, pero ¿qué pasaría si uno de mayor tamaño se avecinara a nosotros? La NASA está al tanto de este riesgo y, de hecho, ha estado investigando tecnologías para defender nuestro planeta de posibles colisiones con rocas espaciales gigantes.
La prueba de redireccionamiento de doble asteroide (DART), programada para lanzarse el 24 de noviembre, es producto de ello. Los representantes de la agencia informaron que esta probará un método para desviar asteroides peligrosos golpeándolos con naves espaciales de alta velocidad controladas de forma remota.
Pero para lograrlo, primero es necesario identificar los objetos espaciales a tiempo. Para ello existe otra misión llamada NEO Surveyor en la que se está desarrollando un telescopio espacial infrarrojo más sensible.