Chad, aliado estratégico de París, sumido en la incertidumbre tras la muerte de Idriss Déby

Por RFI

En Yamena, la capital de Chad, reinaba un ambiente de incertidumbre este miércoles 21 de abril, al día siguiente del anuncio de la muerte de Idriss Déby Itno, presidente en ejercicio desde 1990. La ciudad está desierta y sus habitantes oscilan entre la tristeza y la preocupación.

La capital se despertó este miércoles al amanecer con la llamada de los almuédanos, miembros de las mezquitas responsables de convocar de viva voz a la oración, pero hubo que esperar hasta las 5 de la mañana, como indicaba la orden del consejo militar, para poder salir. El tráfico era fluido cuando en tiempos normales a estas horas los atascos son legión en Yamena.

La población está conmocionada por la muerte de Déby Itno debido a las heridas recibidas en una operación militar contra los rebeldes en el norte. Uno de sus hijos, Mahamat Idriss Déby Itno, comandante de la guardia presidencial, va a dirigir al Consejo Militar de Transición encargado de reemplazar al presidente, de acuerdo a un comunicado militar.

“Tenemos miedo, ¿aceptarán los militares quedarse sólo 18 meses? No es fácil, no conocemos el futuro”, dice a RFI Khamis, habitante de Yamena de unos  sesenta años.

El Consejo Militar de Transición anunció la suspensión de la Constitución y la disolución del gobierno y el Parlamento. Entre las personalidades de alto rango convocadas para la sucesión presidencial estaba el presidente de la Asamblea Nacional quien, según nuestras informaciones, declinó la propuesta de asegurar la transición. Citó su avanzada edad y, sobre todo, la complejidad de la situación de seguridad y pidió a los militares que llenen el vacío de poder, dijo una fuente de seguridad. La información todavía no fue confirmada por el presidente de la Asamblea Nacional. El Consejo Militar de Transición (CMT) se dio un año y medio para organizar nuevas elecciones, añadió la misma fuente.

Desde el martes, emisarios de la CMT han comenzado a visitar a los principales actores políticos para solicitarles apoyo político. Un apoyo que el comité necesitará para hacer frente a la creciente protesta contra un poder que ahora dirige el hijo del mariscal Idriss Déby Itno, el teniente general Mahamat. A los 37 años, se convirtió en jefe de Estado y comandante supremo del ejército. Hasta ahora, estaba al frente de la famosa DGSSEI, una especie de guardia presidencial, el cuerpo de élite del ejército. A su lado hay catorce jefes militares, algunos de los cuales se encuentran entre los más influyentes de los últimos años.

Oficialmente, el ejército se ha hecho con el gobierno sin problemas. Sin embargo, fuentes de Yamena hablan de tensiones dentro del primer círculo de mando, en particular sobre el reparto de poder dentro del nuevo consejo.

Otro problema es que este consejo militar de transición se ha otorgado a sí mismo plenos poderes, algo que no está previsto en ninguna parte de la Constitución, actualizada en diciembre de 2020. Así lo denuncia organizaciones de la sociedad civil, la oposición, así como los partidos que forman parte de la mayoría que apoya al oficialismo.

Francia pierde un socio clave en el Sahel

Idriss Déby Itno, fiel a su reputación guerrero, nunca había rehuido a las batallas, a menudo en primera línea desde su golpe de Estado, el 2 de diciembre de 1990, que le llevó al poder con ayuda de Francia.

El presidente chadiano había hecho de su ejército uno de los mejores del continente. El batallón chadiano de la fuerza conjunta africana contra los organizaciones yihadistas, llegó hace unas semanas a Malí. Su presencia podría cambiar la situación en Gurma, donde proliferan los grupos yihadistas.

Chad fue uno de los primeros firmantes de los acuerdos de defensa ratificados por Francia durante el período de independencia. Estos acuerdos se reforzaron en 1976 con la cooperación militar y técnica.

La relación entre Idriss Déby Itno y Francia se remonta a los años 80. En ese momento, París hizo suya su causa, abandonando a Hissène Habré, el presidente en funciones. Tras su llegada al poder en 1990, la cooperación entre ambos países se intensificó. Francia decidió posicionar allí parte de sus fuerzas y, en 2014, establecer en Yamena el centro de su nueva operación, denominada Barkhane.

Por ello, Francia acudirá repetidamente en ayuda de Idriss Déby cuando se vea amenazado por los rebeldes, como en 2008 bajo el mandato de Nicolas Sarkozy o bajo la presidencia de Emmanuel Macron en 2019.

Nunca se ha negado esta estrecha relación entre ambos países. En 2019 se firmaron seis acuerdos de cooperación bilateral destinados a la modernización y formación de las fuerzas de seguridad chadianas. Se trata de una ayuda directa a Yamena, sobre todo en materia de inteligencia, que se suma al apoyo que Francia presta a la fuerza conjunta del G5 del Sahel, de la que Chad es un miembro destacado.

La fuerza Barkhane realiza vuelos de reconocimiento sobre el territorio chadiano. Un apoyo aéreo muy útil para contrarrestar la amenaza de las columnas rebeldes que bajan regularmente del norte y amenazan la capital Yamena. Como último recurso, si la situación lo requiere, los aviones franceses también pueden realizar ataques, como ya lo han hecho, en tres ocasiones, en febrero de 2019.

Por Franck Alexandre, Pierre Firtion, con nuestros corresponsales en Yamena, Aurélie Bazzara y Madjiasra Nako, y AFP.