Gobierno argumenta que por ‘prisa’ dio contratos a empresa acusada de monopolio
Por Arturo Angel Animal Político – Entre las justificaciones para dar contratos sin competencia a Corporativo Kosmos hay una que el propio presidente había señalado como una fórmula para actos de corrupción.
La “urgencia” de comprar sillas, carpas y moños de distintos colores para que el crimen “no rebase a la policía”. O la importancia de que las personas no dejen de comer y estén bien alimentadas, o la necesidad de hacer contratos de última hora porque no alcanzó lo adquirido con licitaciones consolidadas…
O de plano porque sí, porque es un mecanismo que la ley contempla y no hay tiempo para otro procedimiento.
Estos son algunos de los argumentos con los cuales gobierno federal y gobiernos locales han justificado la entrega de contratos sin competencia al consorcio Corporativo Kosmos, un grupo de tres empresas que en los últimos años ha acaparado las compras de alimentos en el sector público, y a los que también se les han adjudicado otros servicios que nada tienen que ver con ello.
Algunos de estos argumentos, como el de las adquisiciones de última hora posteriores a compras consolidadas, han sido señalados por el propio presidente Andrés Manuel López Obrador como un “modus operandi” que abrió la puerta a la corrupción en gobiernos anteriores. Lo usó de ejemplo para la compra de medicamentos, sin embargo, documentos oficiales prueban que continúa ocurriendo en el actual sexenio, al menos en cuanto a los alimentos.
De todos esos contratos más del 75 % se han entregado vía adjudicación directa, es decir sin competencia. Hubo otro de invitación restringida, y solo 11 por la vía de la licitación pública.
Esta proporción es inversa a lo que marca el artículo 134 de la Constitución y las leyes de adquisiciones federales y locales que priorizan como método de contratación general la licitación pública, y como excepciones otros mecanismos como las adjudicaciones directas, debiendo justificarse para ello el motivo por el cual no se utilizó la competencia abierta.
Dichas normas señalan que un contrato solo se puede adjudicar directamente a una empresa en situaciones específicas (como una emergencia natural o una situación extraordinaria) que justifiquen el que no se haga una convocatoria abierta para contratar a la que tenga la mejor propuesta, tanto en precio como en calidad del producto o servicio (licitación pública).Y la decisión debe estar bien argumentada y aprobada por un comité diseñado para ello.
Animal Político solicitó a tres instancias federales, que este año han otorgado contratos a Kosmos, copia de la justificación y aprobación del procedimiento de adjudicación directa. A su vez se revisaron contratos locales para identificar el argumento legal con el que se sustentó la no licitación pública.
A continuación algunos ejemplos de esos hallazgos. Aunque se buscó también la posición oficial de Presidencia sobre la adjudicación de esto contratos, hasta la publicación de esta nota no se recibió respuesta. De igual forma se buscó al gobierno de Ciudad de México pero su respuesta fue que se preguntara a cada dependencia involucrada.
Contrato SEGOB/PF/CSG/DGRM/C003/2019
Objeto del Contrato: Servicio de casetas sanitarias, regaderas móviles y equipo para eventos en general (carpas, mesas, sillas, cintas para moños, etc…)
Contratante: Policía Federal (Segob) Monto: $8,000,000.00
El documento entregado por la Policía Federal señala que la justificación legal para haber exceptuado a este contrato de la licitación pública se basa en el artículo 41 fracción V de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, el cual habla de compras en situaciones de “caso fortuito o fuerza mayor”.
Tras reseñar las facultades legales con que cuenta la PF para contratar servicios, se detalla “la motivación” para haber optado por la adjudicación directa. Se sostiene que los actos de autoridad son hechos fortuitos, y que la Policía Federal requiere de condiciones que le permitan mantener su operatividad en todo el país para mantener el crimen.
Y se advierte que, de recurrir a la licitación pública para este contrato, el procedimiento se extendería por lo menos un mes debido al cambio de gobierno y los procedimientos de contratación. Ello –añade el oficio– afectaría la operatividad de la policía y por ende la efectividad en la lucha contra el crimen.
“Con el objetivo de no afectar las funciones administrativa y operativas del personal desplegado en diversos operativos, se requiere contar con el servicio objeto de la contratación que nos ocupa, y que tras no cumplimentar los objetivos, la delincuencia organizada podría rebasar la capacidad de reacción de la Policía Federal, creando la situación prefecta para que los elementos adscritos a la misma pudieran sufrir atentados en su contra”, responde el documento.
¿Cuál es el servicio objeto de dicho contrato que se advierte como urgente contratar? El documento refiere que se trata de comprar baños móviles, regaderas y “equipo para eventos en general”. Y más adelante se detalla la lista: carpas, tarima, templete alfombrado, mantel, mesa imperial, mesa bridge, silla tifany, silla acojonada, cinta para moños en varios colores, servilleta de tela en varios colores, periquera con bancos, unifila, entre otros.
El contrato fue adjudicado a la empresa Productos Serel S.A. de C,V., una de las compañías del Corporativo Kosmos. En su página de internet, la empresa dice dedicarse a dar “soluciones de alimentación”, pero no a ofrecer productos como los contratados por Policía Federal.
En los documentos entregados, la PF sostiene que se hizo un estudio de mercado y resultó que esta empresa era la “mejor opción”. No obstante dicho estudio no fue detallado en los documentos entregados.