La ciudad, un fantasma comercial

De unos meses a la fecha, la capital del estado se ha convertido una ciudad fantasma, tal parece que sus políticos y empresarios, piensan dejarla a su suerte sin que nadie rescate a pequeñas empresas y sus empleados, todos los cuales se han ido a la ruina durante los últimos tiempos.

La otrora ciudad orgullosa joya de la corona mira pasar estos tiempos como si fueran los últimos, en calidad de desahucio, de fantasma arruinado, quizás similar a la aniquilación bélica que en 1914 la dejaron las fuerzas villistas y federales.

El asunto no deja de ser grave una joya cultural para la cual de manera cursi los políticos la han dejado morir.

Esos políticos que la han usado a su arbitrio con el fin de enriquecerse de ella en términos de demagogia y ganancia financiera sin que le devuelvan un poco del lustre hoy perdido.

Zacatecas, Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1992 por la UNESCO pierde sus empresas pequeñas, sus empleados, su posicionamiento estratégico rumbo al norte, empobrecida por la pandemia, la quiebra de sus mini industrias y la disolución de miles de empleos hace meses.

Todo lo demás, queda dicho, cursilería, ramplonería, baratura política, engañifa y ausencia de proyectos reales para entrarle a resolver sus problemas.

Gabriel Rodríguez, Informativo Render Noticias.

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