La Nobel de Literatura Svetlana Alexievich se niega a responder a los investigadores bielorrusos
Vicenta Linares /Radio Francia Internacional
La Premio Nobel de Literatura Svetlana Alexievich estaba citada este miércoles ante el comité de investigación bielorruso como testigo por la creación del denominado Consejo de Coordinación de la oposición.
La ganadora del Premio Nobel de Literatura de 2015, Svetlana Alexievich, se negó este 26 de agosto a responder a las preguntas de los investigadores bielorrusos que la habían convocado en relación con los cargos contra el Consejo de Coordinación de la oposición, del que ella es miembro.
Este consejo fue formado por la oposición para promover una transición del poder, en momentos en que el presidente Alexander Lukashenko se enfrenta, desde su controvertida reelección el 9 de agosto, a un movimiento de protesta jamás visto.
“Utilicé mi derecho a no testificar contra mí misma”, dijo Alexievich, de 72 años, a la prensa después de dejar el comité de investigación. “No me siento culpable de nada”, subrayó, asegurando que el Consejo de Coordinación no tiene “otro objetivo que el de consolidar la sociedad” y que su acción es legítima.
Svetlana Alexievich es una ex periodista, y su trabajo literario, basado en testimonios, está en la frontera entre el documental y la literatura. Su primer libro, La guerra no tiene rostro de mujer, se basa en entrevistas con cientos de mujeres que vivieron la Segunda Guerra Mundial. Llevó a que se la acusara de “destrozar la imagen heroica de la mujer soviética”, aunque Mijail Gorbachov la defendió. El libro no se publicó hasta 1985 y la hizo inmediatamente famosa en la Unión Soviética y en el mundo. Su obra más notable, Voces de Chernóbil, es el resultado de 10 años de trabajo sobre la catástrofe de Chernóbil y sus consecuencias. Un libro prohibido en Bielorrusia, donde el tema es tabú.
“Creo que tenemos que estar juntos, no rendirnos (…), tenemos que ganar una victoria con la fuerza de nuestro espíritu y nuestras convicciones”, dijo, advirtiendo contra el “derramamiento de sangre”.
La semana pasada, el poder judicial de Belarús inició un procedimiento contra el Consejo de Coordinación, acusado de llamar a “acciones dirigidas a socavar la seguridad nacional”, enfrentándose a penas de entre tres y cinco años de prisión.
Otros dos miembros del consejo, Sergei Dilevski y Olga Kovalkova, fueron condenados el martes a diez días de prisión en relación con la manifestación no autorizada del domingo en Minsk, que atrajo a casi 100.000 personas.
Con la AFP