¿Por qué los ojos pueden “eyectar” agua si nos sonamos la nariz con mucha fuerza?
Definitivamente eyectar agua por los ojos no es una actividad de todos los días. Pero, algunas personas particulares, parecen tener bajo la manga esa curiosa habilidad lista para funcionar como un curioso y un poco perturbador truco con el que entretener a sus amigos.
Hasta la fecha, la extraña capacidad corporal se había mantenido como una curiosidad, pero no se había estudiado a fondo. Ahora, gracias a los esfuerzos de la ciencia, finalmente podríamos haber encontrado una explicación para el raro fenómeno.
Un truco corporal bastante particular
De acuerdo a lo que se sabe, las personas que son capaces de eyectar agua u otros líquidos por los ojos usualmente conjuran su habilidad con la maniobra de Valsalva. Ella consiste en simplemente respirar hondo, cerrar la boca, pellizcar la nariz –para cerrar los conductos nasales– y exhalar con fuerza durante unos 10 o 15 segundos.
Quienes tienen la capacidad de sacar agua a chorros de sus ojos, podrán hacer tal truco tanto aspirando agua por la nariz, como leche u otros líquidos. Claramente, los conductos nasales y lacrimales no se construyeron para funcionar de tal manera, por lo que es natural que nos preguntarmos de dónde han sacado estas personas tal capacidad.
Los conductos lagrimales
Todo tiene que ver con la forma en la que están formados los conductos lagrimales o nasolagrimales. Mientras que el saco lagrimal, ubicado en la parte superior derecha del ojo es el punto de origen de las lágrimas, los conductos son su “sistema de drenaje” final.
El drenaje de las lágrimas se acumula en el saco lagrimal ubicado en la parte del ojo más cercana a la nariz. Desde allí, el líquido se drena a través de los conductos nasolagrimales para que llegue a la nariz y a la garganta. Es ese el motivo por el que, cuando una persona llora, también puede comenzar a producir más mucosidad.
Las personas que pueden eyectar agua desde sus ojos pueden tener ligeras variaciones en la construcción de su sistema lacrimal que permitan que los conductos actúen como más que solo drenajes.
¿Cómo los ojos pueden “eyectar” agua u otros líquidos?
Al realizar la maniobra de Valsalva, las personas ejercen presión sobre su saco lagrimal y, en algunos casos, pueden llegar a disparar agua a chorros por sus ojos. En un caso habitual, el flujo de aire o de líquido que sube cuando nos sonamos la nariz debería tomarse con símiles a “válvulas” dentro de los conductos que eviten que continúe subiendo.
Pero, cuando dichos reguladores de flujo no están, entonces el aire o el agua seguirán subiendo en busca de una salida para liberar la presión. Al final, dicho punto de escape serán los ojos, que podrán eyectar humo, agua o el líquido que haya subido por los conductos.
Por los momentos, aún no se ha identificado qué cambio en el organismo ocasiona esa pequeña diferencia de funcionamiento de los conductos lagrimales. Afortunadamente, según se ha visto, tener dicha capacidad no es un riesgo para la integridad del ojo. Eso siempre que se mantenga una buena higiene del mismo.