Subdirector del centro Gamaleya asegura que la inmunidad de los primeros vacunados con Sputnik V dura ya 9 meses
Por RT Internacional
El microbiólogo ruso Denís Logunov, subdirector del centro Gamaleya –cuyos científicos crearon la vacuna Sputnik V contra el covid-19–, afirmó este miércoles que todos los empleados de esa institución que fueron vacunados entre los primeros mantienen la inmunidad contra el coronavirus desde hace ya nueve meses.
Logunov detalló que los vacunados con Sputnik V tienen un nivel promedio de anticuerpos más alto que los recuperados de la enfermedad. Y aunque todavía no hay una estimación oficial acerca de por cuánto tiempo se mantenga esa inmunidad, cosa que determinarán los resultados de los ensayos clínicos, el científico aseguró que las conclusiones serán publicadas tan pronto como las obtengan.
De otra parte, Logunov no precisó a qué se refería exactamente al hablar de inmunidad: si se trata solo de la presencia de anticuerpos en el organismo de los vacunados, o si estos desarrollaron una respuesta inmune en forma de células T, que directamente matan el virus una vez que entra en el organismo.
La comunidad científica internacional aún no sabe qué cantidad de anticuerpos –que sirven para bloquear la entrada del virus en el organismo– tiene que estar presente para garantizar protección, ni qué cantidad del virus son capaces de bloquear esos anticuerpos durante un potencial contacto con el patógeno.
El director del centro Gamaleya, Alexánder Guíntsburg, se vacunó con Sputnik V el 30 de marzo, junto con sus colegas, y durante los más de nueve meses que han pasado desde entonces su nivel o título de anticuerpos ha sido de 1/3.200.
“Creo que no es porque la vacuna sea una maravilla, sino porque tenía un título inicial muy alto y porque infrinjo las normas y siempre voy sin mascarilla. Como el virus está presente ahora en todos los lugares públicos, en el transporte y en tiendas, mi sistema inmune está en contacto continuo con el virus y se mantiene constantemente activo”, sostuvo el científico en una entrevista concedida a RT.
Según Guíntsburg, el nivel particularmente alto de anticuerpos que contiene su plasma “neutralizará muy grandes concentraciones del virus” en caso de que aparezcan en su organismo. Pero, además de los anticuerpos, también se han observado indicios de la formación de inmunidad de las células T después de la vacunación.
La vacunación con Sputnik V no descarta la posibilidad posterior de resultar infectado por el coronavirus, admite Guíntsburg, pero afirma que en tal caso se trataría de un episodio asintomático de la enfermedad o con apenas síntomas de “una gripe leve, con una temperatura de 37,5 y congestión nasal“, y en cualquier caso sin infecciones pulmonares ni requerimientos de hospitalización.