¿Subtítulos en todas partes? La nueva estrategia para superar la pérdida auditiva
Se dice que la subtitulación es la mejor manera de disfrutar del cine, ya que se conservan las interpretaciones originales de los actores. Pero los subtítulos o “captions” podrían ser mucho más que simples traducciones para las personas con pérdida auditiva, si empezaran a implementarse en todas sus actividades diarias.
Más de 40 millones de personas con sordera han tenido dificultades para comunicarse desde la pandemia de Covid-19. En parte, por el uso de mascarillas que limitan la lectura de los labios, pero sobre todo, por la aparición de nuevas tecnologías como las videollamadas o las conferencias digitales. Plataformas que no tienen muy en cuenta que los audífonos y los implantes cocleares en el cerebro no interpretan bien el sonido de los dispositivos.
Por fortuna, la Universidad Johns Hopkins ha encontrado una solución accesible, cómoda y económica para evitar estos sesgos sociales: utilizar los subtítulos como si fueran audífonos portátiles.
Una forma mucho más sencilla de explorar la pérdida auditiva
El equipo de investigadores ha participado en el desarrollo de aplicaciones de inteligencia artificial en los últimos años. Tales como Otter, Live Transcribe, Ava o InnoCaption, que utilizan revisores humanos para asegurarse de que los subtítulos sean precisos para las personas con pérdida auditiva.
Cada una de estas aplicaciones utiliza el llamado “reconocimiento de voz automático” para capturar el discurso en vivo y convertirlo en una transcripción sin retrasos. Algo muy similar a lo que lleva años haciendo Youtube con sus vídeos, con la excepción de que estos subtítulos pueden traducir conversaciones e incluyen la intencionalidad del emisor.
La subtitulación centrada en los problemas auditivos nunca ha sido igual a las transcripciones para idiomas extranjeros. Si abrimos Netflix, por ejemplo, notaremos que existen colores e incisos entre paréntesis que no tienen nada que ver con la transcripción de voces.
Esto ocurre porque las personas con sordera no pueden diferenciar quién está hablando o el tono en el que lo está haciendo. Por lo tanto, debe identificarse al hablante en cada subtítulo, e incluir todas las aclaraciones pertinentes sobre el contexto en el que se habla. Es decir:
- El intralingüístico (si habla en el mismo idioma) o interlingüísticos (si utiliza otros idiomas).
- Los sonidos no verbales (aplausos, risas, golpes o música de fondo).
- Y la ironía en la oración, si la hay.
Hasta ahora, solo las plataformas de streaming Amazon Prime, HBO Max o Netflix utilizaban estos subtítulos especializados en la pérdida auditiva. Lo que limitaba mucho el entretenimiento de las personas sordas.
Pero gracias a estas nuevas aplicaciones ahora es posible llevar los subtítulos a todas partes.
El alcance de los subtítulos es mucho más amplio de lo que pensamos
Además de las transcripciones en línea, estas aplicaciones pueden utilizarse en el cine para reproducir subtítulos, tal y como lo harían en la comodidad del hogar. Con lo cual las personas con discapacidad auditiva no tendrían que preocuparse por el hecho de que la película que quieren ver no esté subtitulada.
De igual forma, la aplicación GalaPro ahora permite disfrutar del teatro en vivo en formato subtitulado. Varias salas de Broadway habilitan teléfonos inteligentes equipados con esta aplicación de subtítulos para que las personas con pérdida auditiva puedan entender sus actuaciones mientras ven el escenario.
Incluso plataformas como Zoom y Google Meet ya han puesto a nuestra disposición subtítulos gratuitos durante las reuniones. Tanto para las personas con sordera, como para aquellos con mala conectividad. De tal manera que puedan trabajar desde sus hogares con mucha más facilidad.
En este sentido, la idea inicial de la Universidad Johns Hopkins se ha convertido en una tendencia actualmente. Y cada vez son más las empresas que se han hecho conscientes de que necesitamos subtítulos en todas partes. Ya sea para aprender un nuevo idioma, para conversar o simplemente para disfrutar de la vida.
¿Los subtítulos son la mejor solución?
Muchas veces, los subtítulos pueden resultar molestos. En especial, para las personas que no sufren de una discapacidad auditiva, ya que distraen su atención del espectáculo. Pero en comparación con el resto de soluciones disponibles, los subtítulos son por ahora la mejor forma de incluir a las personas sordas en las actividades diarias.
Los audífonos digitales son dispositivos muy costosos, por lo que los pacientes con bajos recursos o un leve nivel de sordera tienden a evitar la compra de estas herramientas. Y el lenguaje de señas no suele ser eficaz a largo plazo debido al pequeño espacio que le dedican en la pantalla.
Por lo tanto, deberíamos al menos permitir que las personas sordas cuenten con subtítulos para poder traducir lo que sucede dentro y fuera de las pantallas.