La canícula favorece la aparición de bacterias nocivas para los humanos y para la biodiversidad
Europa está enfrentando una nueva canícula ola de calor, es decir, de canícula. Las altas temperaturas no solo afectan a las personas vulnerables, también favorecen la aparición de bacterias que pueden producir enfermedades en los seres humanos pero también en los animales.
En este reportaje, Juanjo Carmona, responsable de la organización ecologista WWF en el Parque Nacional de Doñana, en la provincia española de Huelva, explica cómo las altas temperaturas, la ausencia de vientos y la falta de movimiento de las aguas, propician la aparición de especies exóticas que perturban la biodiversidad local y cómo el recalentamiento favorece la aparición de bacterias que enferman y matan a algunas especies animales.
En un estudio publicado este año, WWF indica que el cambio climático es un factor que desempeña “un doble papel” en los procesos relacionados con el desarrollo de enfermedades.
El cambio climático impacta directamente en la salud de las personas y amplifica las principales amenazas que afectan a la biodiversidad, favoreciendo la expansión de virus o bacterias, afirma WWF en su informe.