¿Qué beneficios para la piel tienen los antioxidantes que no tengan otros productos similares?
Para estar al tanto de los beneficios que los antioxidantes pueden brindarle a tu piel, decidimos compartir lo que dicen los expertos sobre el tema.
Antes de hablar de los antioxidantes, primero hay que saber qué son los radicales libres. Los factores estresantes ambientales y biológicos, como la contaminación, el humo del tabaco, los virus y bacterias, etc., hacen que nuestro cuerpo reaccione a ellos. El organismo responde a esos elementos dañinos generando compuestos altamente bioactivos. En este proceso, los radicales libres pueden llegar a perder uno o más electrones en su estructura atómica. Para volverse más estables, los radicales libres tienden a robar electrones de otras moléculas. El proceso en cuestión se llama estrés oxidativo, y causa daño tanto al ADN como a las membranas celulares del cuerpo.
El estrés oxidativo no es tan malo, puesto que el cuerpo lo necesita para combatir las infecciones o eliminar las células defectuosas. Sin embargo, si hay demasiado estrés oxidativo, aparecerán resultados adversos para la salud. En este punto es en el que intervienen los antioxidantes.
Los antioxidantes contrarrestan la acción de los radicales libres, ya que están dispuestos a cederles algunos de sus propios electrones. De esta manera, protegen a las células del daño que pueden causar los radicales libres.
El cuerpo humano puede producir antioxidantes por su cuenta, pero la mayoría de ellos deben ingerirse con alimentos o aplicarse tópicamente.
¿Qué beneficios para la piel tienen los antioxidantes?
Los antioxidantes se han puesto de moda en los últimos años por los múltiples beneficios que estos tendrían para la piel.
Debido a todo el daño que los radicales libres pueden hacerle a la piel, los antioxidantes aparecen como la solución más eficaz al problema. Esto lo consiguen mediante su capacidad de eliminar los radicales libres en la piel, ayudando a mantener la salud y la apariencia juvenil de la piel.
El estrés oxidativo a veces se produce por la exposición a los rayos UV. Entonces, los antioxidantes hacen su trabajo protegiendo a la piel contra el daño por la exposición a la radiación ultravioleta.
Para darle antioxidantes a la piel, los expertos sugieren las dos vías conocidas: por fuentes dietéticas y en forma de tópicos.
Si se digieren con los alimentos, los antioxidantes beneficiarán a todo el cuerpo. Sin embargo, los expertos recomiendan aplicar los antioxidantes por medio de tópicos. De esta manera se archivan concentraciones más altas localmente en la piel.
Cuando apliques un tópico con antioxidantes, es aconsejable colocar protector solar de amplio espectro sobre este. O, en todo caso, recurrir a un protector que ya contenga antioxidantes entre sus componentes.
Los mejores antioxidantes
Entre los mejores antioxidantes se encuentran las vitaminas C, E, D, B3, A y retinoides; también la astaxantina, el resveratrol, y los polifenoles del té verde.
La vitamina C protege al sistema inmunológico, disminuye la hiperpigmentación, promueve la producción de colágeno. También regula la producción de sebo y reduce las lesiones causadas por el acné.
La vitamina E se encarga de proteger a las membranas celulares de la oxidación. Además, reduce el riesgo de desarrollar enfermedades autoinmunes de la piel, como el eczema atópico y la psoriasis. Si se aplica en forma de crema o bálsamo, protege a la piel de las quemaduras solares, la pigmentación excesiva e incluso el cáncer de piel.
En cuanto a la vitamina D, esta mantiene la salud de los huesos y fortalecer el sistema inmunológico. Además, protege la piel contra el daño y la inflamación fotoinducidos. La vitamina D también puede detener el daño del ADN, retrasando los procesos de envejecimiento y reduciendo el riesgo de desarrollar cánceres de piel.
La vitamina B3 ayuda a regular los niveles de lípidos en la sangre, reduce la presión arterial, estimula la función cerebral y aumenta los niveles de energía. También ayuda a disminuir la hiperpigmentación y el enrojecimiento, fortalece la barrera de la piel y reduce la inflamación. En forma de tópico, ayuda a tratar el acné, la dermatitis atópica y la rosácea.
La vitamina A es un retinol que protege a la piel de la radiación UV, también mejora la apariencia de las arrugas y la flacidez de la piel. Se dice que la vitamina A reduce el riesgo de cáncer de piel, acné y psoriasis.
En cuanto a los polifenoles como el resveratrol, los flavonoides y los activos de extracto de té verde son antioxidantes muy potentes que ayudan a reducir los signos del envejecimiento y la inflamación, además protegen la piel contra el cáncer y el daño solar.