Los ornitorrincos no están solos: los wombats y otros animales australianos también pueden ser fluorescentes

Durante años se ha conocido la capacidad de los escorpiones para mostrar fluorescencia bajo la luz ultravioleta. Es algo que también ocurre con algunos peces, insectos y anfibios. Sin embargo, que algunos mamíferos también tienen esta cualidad era mucho más desconocido. La sorpresa llegó hace apenas un mes, con la publicación de un estudio que mostraba este “superpoder” en los ornitorrincos. Ante este descubrimiento, algunos científicos australianos pensaron que quizás este no era el único animal propio de la región capaz de hacerlo. Por eso, se armaron con una linterna ultravioleta y comenzaron a irradiar varios de los animales disecados expuestos en el Museo de Australia Occidental. Y, efectivamente, sus sospechas resultaron estar en lo cierto, pues varias de las especies analizadas comenzaron a iluminarse. Resulta especialmente llamativo el caso de los wombats fluorescentes.

Quizás porque estos animales ya son bastante originales y curiosos por otros muchos motivos. Hasta sus propias heces son todo un misterio que ha llamado la atención de los científicos. Ahora, también sabemos que pueden emitir fluorescencia bajo la luz ultravioleta.

 

Wombats fluorescentes y otros animales ‘brillantes’

Los dos científicos que se encargaron de esta curiosa labor fueron el taxidermista Kenny Travouillon y la bióloga Linette Umbrello.

En total iluminaron unos 24 mamíferos. Así encontraron a los wombats fluorescentes, pero también a otros cuantos animales, que incluían equidnas, bandicoots, bilbies, zarigüeyas, algunos murciélagos y ornitorrincos. Sí, volvieron a comprobarlos.

 
 

El siguiente paso de estos científicos será buscar las moléculas responsables de esta fluorescencia. De momento, han visto que no se distribuye por todo el cuerpo homogéneamente en algunos de ellos. Por ejemplo, en los bilbies parece concentrarse especialmente en la cola y las orejas.

Además, esperan poder determinar los motivos por los que han desarrollado esta cualidad. Ciertamente, la mayoría de ellos son especies nocturnas. Sin embargo, casi todos los marsupiales lo son, por lo que no es posible saber si es una propiedad asociada a que son marsupiales o a que viven por la noche.

 

Por otro lado, han comprobado que no suele darse en depredadores, quizás porque prefieren no ser vistos por sus presas para añadir el factor sorpresa a sus ataques. Pero en ese caso las propias presas también deberían evitarlo, para no ser detectadas. De cualquier modo, en ausencia de una fuente de ultravioleta no podrían fluorecer, por lo que quizás no esté vinculado a la oscuridad. En declaraciones a Science Alert, Travouillon ha explicado que quizás todo se base en que ellos pueden ver mucho más de lo que nosotros llegamos a ver.

Son muchas las incógnitas que quedan por responder. Al menos, ahora sabemos que los ornitorrincos no estaban solos. Bastante “bichos raros” se les consideraba ya como para sumar otra peculiaridad única a su lista.

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